Innovar en el ámbito de la investigación biomédica es clave para que los estudios y ensayos clínicos que se llevan a cabo puedan tener una aplicación práctica real y los y las profesionales sanitarios puedan basarse en ellos para prevenir y tratar enfermedades de una forma más personalizada y eficiente. En este sentido, diferentes grupos de investigación del Institut d’Investigació Sanitària Pere Virgili (IISPV), de Tarragona, han ideado y están en proceso de implementar dispositivos médicos, fármacos, plataformas online basadas en la inteligencia artificial y sistemas de cribado para detectar y tratar a tiempo patologías con mucha incidencia en nuestra sociedad, como los cánceres de mama y el colorrectal o la obesidad. A continuación, se detallan algunos ejemplos:
Datoma, una plataforma online para que los investigadores procesen datos biológicos de pacientes a gran escala y de forma rápida sin tener conocimientos de programación
Uno de los proyectos innovadores puestos en marcha desde el IISPV, la Universidad Rovira i Virgili (URV) y el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) es la plataforma Datoma para el análisis de datos científicos en la nube. Gracias a esta herramienta online, los investigadores podrán procesar de forma rápida y sin necesidad de tener conocimientos de los lenguajes de programación, los datos biológicos de los miles de pacientes que hay almacenados, como los referentes al funcionamiento de sus genes, a la expresión de las proteínas, al metabolismo o a la microbiota.
Todas estas informaciones relevantes pueden ser extraídas gracias a la aplicación de las llamadas tecnologías ómicas (engloban campos de la investigación como la genómica, la transcriptómica, la proteómica o la metabolómica), que permiten analizar la elevada cantidad de moléculas presentes en una muestra de forma rápida y en grandes proporciones.
En este sentido, Óscar Yanes, uno de los investigadores que lidera el proyecto, explica que a través de la plataforma Datoma “cualquier investigador o investigadora podrá analizar estos datos sin tener ningún tipo de formación en programación con la ayuda de los códigos que desarrolladores habrán subido previamente”.
En el ámbito de la investigación, procesar los datos científicos de forma rápida y a gran escala es clave ya que la información que se desprende de este análisis será determinante para que los investigadores puedan encontrar biomarcadores para comprender las causas y factores de riesgo de enfermedades, y para diagnosticarlas y tratarlas de forma personalizada.
Ideación y fabricación de moldes para el análisis de biopsias más fácilmente manipulables
La innovación en el ámbito de la investigación que lleva a cabo el IISPV también ha permitido desarrollar dispositivos médicos para ayudar a mejorar el diagnóstico, pronóstico y tratamiento de patologías con una elevada incidencia en nuestra sociedad, como el cáncer de mama. En este sentido, investigadores del Grupo de Investigación en Patología Oncológica y Bioinformática del IISPV (con sede en el Hospital de Tortosa Virgen de la Cinta) han trabajado conjuntamente con profesores del Instituto del Ebro (IE) para idear y fabricar los moldes de parafina conocidos como tissue microarrays o TMA (por sus siglas en inglés) consiguiendo una versión mejorada de la que actualmente existe en el mercado, para que cada uno de ellos pueda ser más fácilmente manipulado por el investigador o la investigadora. Estos moldes son unos de los que más se utilizan en el ámbito de la investigación para el análisis de las tinciones de las biopsias de pacientes. Su diseño permite que puedan ser analizadas un mayor número de muestras, a la vez que ayuda a identificar de forma rápida marcadores que indiquen el pronóstico de una enfermedad.
Las biopsias, para ser analizadas, son teñidas (de ahí el concepto de “tinción”) con distintos líquidos mediante una técnica llamada tinción inmunohistoquímica. En el ámbito de la investigación clínica, este procedimiento es uno de los utilizados para valorar el pronóstico y el tratamiento a seguir en cada paciente.
Innovación al servicio de la prevención del cáncer colorrectal, el tercero con más casos en todo el mundo
Para la IISPV innovación también es sinónimo de contribuir a prevenir cánceres que, como el colorrectal, tienen una elevada incidencia en nuestra sociedad. Éste es el tercer cáncer más diagnosticado en todo el mundo, según la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y el primero en Tarragona, según el Registro de Cáncer de la demarcación.
“Para prevenir el cáncer colorrectal, actualmente se lleva a cabo un cribado en la población, concretamente en las personas con edades comprendidas entre los 50 y los 69 años. Una de las pruebas que contempla este cribado es un test para detectar sangre en las heces, que en el caso de salir positivo, al paciente se le sigue explorando a través de una colonoscopia. Sin embargo, que una persona tenga sangre en las heces no quiere decir que tenga un cáncer colorrectal. Para saber cuándo existe un riesgo real de la presencia de esta enfermedad y cuándo no, hemos comenzado una investigación para estudiar ciertos marcadores en la orina que son cruciales. De esta forma, podremos ahorrar esta prueba a aquellas personas que no la necesiten. Es importante evitar someter a un paciente a una colonoscopia de forma innecesaria ya que esta prueba requiere mucho tiempo para ser preparada y a veces conlleva efectos adversos”, explica Raquel Cumeras, investigadora responsable del proyecto de investigación, liderado por un equipo del IISPV, de la URV y del Hospital Universitario Sant Joan de Reus.
Además de contribuir a identificar aquellos casos en los que existe un riesgo real de la enfermedad, el estudio de biomarcadores en la orina que llevará a cabo este grupo de investigación permitirá detectar cuándo un paciente corre el peligro de que el cáncer de colon se le extienda hasta desarrollar una metástasis.
Nuevas terapias para mejorar la vida de pacientes con obesidad y enfermedades asociadas
La experiencia y prestigio internacional que el Grupo de Investigación en Diabetes y Enfermedades Metabólicas Asociadas (DIAMET) ha conseguido con sus estudios en torno al papel del succinato en las enfermedades metabólicas constituye la base a partir de la cual se pondrá en marcha un proyecto innovador que estudiará nuevas terapias para el tratamiento de la obesidad, el hígado graso y la diabetes tipo 2.
El succinato es un metabolito con múltiples funciones que producen de forma natural las células de nuestro organismo y las bacterias intestinales o microbiota. En enfermedades metabólicas e inflamatorias (como las mencionadas previamente), donde existe una alteración de la microbiota intestinal, los niveles de producción de este metabolito se encuentran elevados, hecho que está directamente relacionado con la inflamación característica en este tipo de pacientes.
El objetivo de este proyecto es, por un lado, seguir profundizando en el estudio del succinato para explorar biomarcadores que indiquen la progresión del hígado graso, y así poder ofrecer a cada paciente tratamientos más eficaces y personalizados; y por otro lado, se pretende buscar nuevos fármacos tanto para este trastorno como para la obesidad y la diabetes tipo 2.
Todos estos proyectos han recibido las ayudas Llavor, Producte e Innovadors, que concede la Agència de Gestió d’Ajuts Universitaris i de Recerca (AGAUR) de la Generalitat de Catalunya, con el fin de dar un impulso a sus procesos de prototipaje e implementación.